Preguntas Frecuentes - Amortiguadores Gabriel

Los amortiguadores son componentes críticos que eliminan el movimiento no deseado y excesivo del vehículo y/o de la suspensión. Sin los amortiguadores, los vehículos rebotarían en el camino de una manera incontrolable. Sin estos, las llantas perderían adhesión y frenar o girar se volverían operaciones peligrosas y hasta imposibles. Los amortiguadores juegan un papel crítico en la estabilidad y seguridad del vehículo.

Al forzar un pistón a través de aceite hidráulico, los amortiguadores generan la fricción hidráulica necesaria para oponer una resistencia al movimiento indeseado y excesivo de la suspensión. Los amortiguadores trabajan en dos direcciones conocidas como: compresión (el amortiguador se cierra) y expansión (el amortiguador se abre) para reducir las vibraciones y oscilaciones excesivas y proporcionar confort a los pasajeros. Además mantienen las llantas en contacto con el piso para lograr el mayor control en todo momento.

La mejor manera de determinar si los amortiguadores funcionan adecuadamente es conducir su vehículo por caminos que conozca y le sean familiares, caminos con distintos tipos de superficie con vados y topes para comprobar el control y la manejabilidad amen del confort. Cuando una fuga de aceite de los amortiguadores es evidente, estos requieren ser reemplazados, pero aunque no haya fuga de aceite evidente, la perdida de control o de confort es indicio de que los amortiguadores están desgastados y requieren ser cambiados.

El kilometraje por si solo, como indicador del buen desempeño de los amortiguadores, es muy pobre. Algunos amortiguadores siguen trabajando bien aun después de 45,000 o 60,000 kilómetros. Otros tienen una vida útil de 6,000 kilómetros. De hecho algunos amortiguadores son tan malos que no trabajan bien ni desde nuevos.

Cada fabricante de amortiguadores declara usar los mejores materiales y el mejor diseño. Sin embargo no todos son iguales. Hay muchas diferencias reales entre los materiales, tolerancias y diseños internos. Se debe tener en mente que la calidad es una consecuencia del tiempo que la marca ha permanecido en el mercado, del comportamiento que esta ha tenido y del grado de mejora. El diseño tiene el mayor efecto en el desempeño del amortiguador. Una buena calidad y diseño sofisticado tienden a ser más caros los amortiguadores que aquellos de calidad decadente. Controlar que haya buena adherencia de las llantas al piso y buen control del vehículo requiere técnicas sofisticadas de manejo de fluidos. Los amortiguadores baratos simplemente no dan estos beneficios.

El aceite utilizado en los amortiguadores contiene diluido partículas de aire. El movimiento rápido del pistón del amortiguador provoca lo que se conoce como cavitación. Esto sucede cuando el aire contenido en el aceite forma espuma. El aceite con espuma no provee la resistencia adecuada. Esto afecta el funcionamiento del amortiguador. Presurizando el aceite, los ingenieros pueden eliminar los efectos negativos de la cavitación. El resultado es un control más consistente y un manejo superior. Hay dos tipos de amortiguadores presurizados. Amortiguador monotubo-alta presión y amortiguador de tubos gemelos de baja presión. Hay un gran número de diseños dentro de esas categorías. Es importante entender que la adición de gas por si sola no transformará un diseño pobre en un amortiguador de mejor calidad.

Las garantías son como los oídos, virtualmente todos hemos oído de ellas. Son argumentos de venta no indicadores de diseños de mejor calidad de los amortiguadores. De hecho algunos fabricantes simplemente cubren el costo de los amortiguadores si estos presentan problemas. Una garantía raramente cubre también los costos de instalación. Lo mejor es invertir en aquellos productos de marcas reconocidas y que normalmente no dan problemas.