La Comisión Internacional de Investigación sobre el Territorio Palestino Ocupado, creada en 2021 por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, presentó un informe que expone las diversas formas de violencia sexual y de género que ha perpetrado Israel.
«Las evidencias recogidas revelan un terrible incremento en la violencia sexual y de género«, destacó Navi Pillay, presidenta de la comisión. El informe sostiene que esta violencia forma parte de «una estrategia de guerra de Israel para dominar y destruir al pueblo palestino«.
Entre los abusos denunciados se incluyen violaciones a detenidos, tratos humillantes en centros de detención y redadas donde las víctimas fueron obligadas a desnudarse o a ser fotografiadas en circunstancias degradantes.
Llamado a la justicia internacional
El informe denuncia que estos abusos se han cometido en un clima de impunidad, y pide que sean investigados por la Corte Penal Internacional o tribunales nacionales con jurisdicción universal.
La ONU también documentó la destrucción sistemática de instalaciones de salud sexual y reproductiva en Gaza, impidiendo la atención de embarazadas y mujeres en el parto, lo que ha causado numerosas muertes por complicaciones.
Los ataques a estas infraestructuras han afectado a unas 540 mil mujeres en edad reproductiva, y durante el conflicto se han cuadruplicado los abortos espontáneos.
Otros ataques denunciados incluyen la destrucción, en diciembre de 2023, de la mayor clínica de fertilidad de Gaza, donde se perdieron 4.000 embriones, y el bombardeo de un refugio para mujeres víctimas de maltrato, en el que soldados israelíes dejaron rayados con insultos hacia ellas.
Mujeres víctimas de francotiradores
La comisión también documentó casos en los que mujeres y niñas, incluso embarazadas, fueron blanco de francotiradores israelíes.
Un caso citado es el de una mujer embarazada asesinada por un disparo cuando se dirigía al hospital de al-Awda, en el norte de Gaza, en diciembre de 2023, cuyo cadáver fue recuperado 20 días después en estado de descomposición.
El informe se presentó tras dos días de audiencias con testimonios de víctimas, testigos y personal sanitario. La comisión recuerda que un tercio de los muertos en Gaza (unos 48.000, según las autoridades gazatíes) han sido mujeres y niñas.
La respuesta de Israel
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, rechazó las conclusiones del informe y lo calificó de intento de «atacar a Israel con acusaciones falsas».
En un comunicado, sostuvo que la ONU ignora «los crímenes de lesa humanidad cometidos por Hamás», y que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU es «un organismo antisemita, corrupto y terrorista».
El Gobierno israelí ha acusado a la ONU de mantener una postura tendenciosa en su contra. En febrero de 2024, oficializó su retiro de toda actividad relacionada con el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.