Más de 9.000 detenciones se han registrado en Ecuador en los 43 días del «conflicto armado interno» que el presidente Daniel Noboa declaró a inicios de enero contra el crimen organizado, a cuyas bandas, dedicadas principalmente al narcotráfico, pasó a considerar como grupos terroristas.
El número de detenidos alcanzó los 9.040 en el último balance diario publicado este martes por el gobierno de Ecuador, de los que 241 fueron acusados de «terrorismo», mientras que se decomisaron más de 62 toneladas de drogas.
Hasta ahora las fuerzas de seguridad han ejecutado 112.418 operaciones conjuntas (más de 2.600 cada día), 157 de ellas contra bandas criminales denominadas ahora por las autoridades como grupos terroristas.
Además, se han incautado 2.682 armas de fuego, 12.470 explosivos, 186.223 balas, 1.295 cargadores de balas y 3.875 armas blancas.
Durante el estado de excepción, las fuerzas del orden han abatido a ocho personas a las que han identificado como terroristas; han fallecido dos miembros de la Policía y no se han registrado bajas en las filas castrenses.
Los agentes también han decomisado a la delincuencia 979 vehículos, 1.028 motocicletas y 28 embarcaciones, entre ellas un semisumergible para transportar droga; además de 224.168,14 dólares.
En la estadística se mantiene la cifra de 34 reos recapturados, de los casi 90 que se fugaron de las cárceles donde, a comienzos de año, ocurrieron varios motines de reclusos con 200 rehenes entre guardias y policías que lograron ser liberados.
Tras declarar el «conflicto armado interno», el gobierno de Daniel Noboa identificó a al menos 22 grupos «como organizaciones terroristas» y «actores no estatales beligerantes», abriendo la puerta legal para que las Fuerzas Armadas junto con la Policía actúen con todos sus recursos para neutralizarlos.