La Corte Suprema confirmó este jueves una sentencia que condena a 15 años de prisión al exmilitar Miguel Krassnoff Martchenko, uno de los agentes más sanguinarios de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), que suma ya más de 1.000 años de presidio.
En un fallo unánime, la Segunda Sala del máximo tribunal ratificó, además, la misma pena a César Manríquez Bravo y Pedro Espinoza Bravo, todos agentes de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA), por su responsabilidad en el secuestro calificado de Manuel Filamir Cartes Jara y José Segundo Flores Rojas, perpetrado en agosto de 1974.
También, condenó a 10 años y un día de prisión a otras dos agentes considerados coautores, Alejandro Astudillo Adonis y Pedro Araneda Araneda, y al fisco a pagar una indemnización de 300 millones de pesos, por concepto de daño moral, a familiares de las víctimas.
«Manuel Filamir Cartes Jara –35 años de edad, obrero de la construcción– y José Segundo Flores Rojas –40 años de edad, peluquero, ambos militantes del Partido Comunista y representantes vecinales de la actual zona de Peñalolén, fueron detenidos en la madrugada del día 23 de agosto de 1974 desde su propios domicilios a raíz de un operativo que se realizó en el sector por parte de la DINA asistidos por miembros de las Fuerzas Armadas y de Orden», explica la sentencia.
Ambos detenidos fueron enviados al cuartel Villa Grimaldi, conocido también como Terranova, y después al centro de detención Cuatro Álamos, «siendo el último de estos lugares donde se les pierde el rastro, ignorándose desde entonces su paradero así como la suerte que han ocurrido en su salud física, síquica e integridad personal, a pesar de todos los esfuerzos desplegados para ubicarlos», agrega.
La represión de la dictadura causó miles de muertos y detenidos desaparecidos, cuyas familias luchan todavía a día de hoy por conocer su destino y que se haga justicia.